Lurcher

Este perro tan activo y amante de las carreras no es apto para vivir en un piso pequeño de ciudad. Para él, lo ideal es una casa en el campo con un terreno grande bien vallado.

Este peludo tan deportista necesita hacer mucho ejercicio y la oportunidad de correr. Sin embargo, esto solo es posible en zonas seguras y delimitadas, como en polideportivos caninos.

Respuesta a la llamada

En los paseos por el bosque o el parque, solo podrás quitarle la correa si responde siempre a tu llamada. El peligro de que se escape para perseguir una ardilla o un conejo es demasiado grande.

Deportes caninos

El coursing es el deporte canino perfecto para este veloz perro. Se trata de carreras de lebreles donde se imita la caza de liebres a campo abierto.

Sin embargo, el agility y el flyball también son perfectos para desfogarlo. De este modo, el perro satisface su instinto de juego.

La dificultad de los cuidados depende de la longitud y la naturaleza del pelo del lurcher. En los ejemplares de pelo corto, basta con cepillárselo una vez por semana. Los de pelo semilargo se deben cepillar más a menudo y, si es necesario, llevarlos a una peluquería canina.

Como los lebreles y mestizos de lebrel como el lurcher son propensos a las heridas en las patas, hay que controlárselas y cortarles las uñas. También deberás examinarle las orejas de vez en cuando y limpiárselas cuando convenga para prevenir inflamaciones.

Energía rápida para plusmarquistas

Este esprínter necesita raciones relativamente generosas de un alimento energético. Para ello, se recomienda darle una mezcla equilibrada de proteínas e hidratos de carbono. La proteína animal es importante para el aporte de nutrientes a los músculos. Por su parte, los carbohidratos de las patatas y las verduras le suministran energía de rápida disponibilidad.

Muchos criadores y cuidadores de lebreles apuestan por el pienso. En su experiencia, la comida húmeda o cruda contiene demasiada agua, que puede provocarles diarrea. Sin embargo, esto no está demostrado científicamente.

El lurcher es un perro robusto con una salud de hierro. Sin embargo, su constitución hace que corra un mayor riesgo de sufrir una torsión gástrica, que podría ser mortal.

En las carreras de lebreles, en particular, existe el peligro de que se lesione las patas o los músculos. Además, un perro no entrenado que haga un sobresfuerzo puede padecer rabdomiolisis. Esta enfermedad muscular, también llamada mioglobinuria, puede resultar mortal en el peor de los casos.

Esperanza de vida

Esta raza híbrida tiene una esperanza de vida bastante alta, de entre doce y quince años.

Además, apenas se le atribuyen enfermedades típicas. De vez en cuando se observan casos de problemas oculares, como cataratas, y distintas enfermedades cardíacas. Con la edad, algunos ejemplares desarrollan cáncer de huesos.

Peludo sensible al frío

Como el lurcher es muy sensible al frío, hay que ponerle un abrigo para pasear en invierno.

El lurcher proviene de las islas británicas, donde ya lo criaban los pueblos errantes hace 600 años. Estos eran pueblos que iban de un lugar a otro y prestaban sus servicios como caldereros o curanderos, por ejemplo.

Como tenían prohibido tener lebreles y practicar la caza, cruzaron lebreles con perros de trabajo. El objetivo de la cría era crear un perro fuerte y rápido para la caza furtiva.

¿Qué significa el nombre lurcher?

Hay varias explicaciones para el nombre lurcher. Por un lado, el nombre podría venir del verbo inglés to lurch, una variante de to lurk, que significa acechar. Por otro lado, podría provenir del romaní, donde el prefijo lur significaría ladrón.

Interesante: si se aparean dos razas de lebrel, ya no se llama a las crías lurcher, sino longdog.

Raza no reconocida

La federación cinológica FCI no reconoce al lurcher como raza independiente. El motivo son las muchas razas de lebrel y perro de trabajo que se cruzan. Esto conduce a un aspecto nada unitario del mestizo.

Sin embargo, se está trabajando para consolidar un estándar de la raza vinculante.