Exoftalmia en peces

Si uno o ambos ojos del pez sobresalen mucho de la cabeza, el pez está apático y come mal, probablemente tenga exoftalmia. Te explicamos qué es la exoftalmia en peces.

¿Es muy peligrosa?

La exoftalmia en peces no suele ser una enfermedad en sí, sino un síntoma de otra enfermedad. La presión elevada presiona los ojos hacia fuera, algo doloroso para el pez.

Para ayudar a tus peces lo antes posible, es importante identificar la causa rápidamente.

Síntomas: ¿qué signos presenta la exoftalmia?

La exoftalmia en peces puede afectar tanto a animales de acuario como de estanque. Los síntomas suelen ser muy fáciles de reconocer:

• Uno o ambos ojos sobresalen claramente de la cabeza.
• Los ojos están enturbiados (como una lente gruesa y turbia sobre el ojo).
• Hinchazón de la conjuntiva
• Apatía
• Poco o nada de apetito
• Dolor
• Trastornos visuales

Si uno o varios de tus peces presentan síntomas de exoftalmia, debes hablar con el veterinario.

Diagnóstico: ¿cómo se detecta?

El diagnóstico de la exoftalmia en peces se emite por medio de las alteraciones visibles. No obstante, es importante hablar con el veterinario y realizar una exploración general exhaustiva.

Con grandes poblaciones de peces conviene realizar exámenes anatómico-patológicos, bacteriológicos y parasitológicos. Para ello, el veterinario realiza un frotis. Si hay varios animales afectados, también puede ser conveniente extraer y analizar muestras de agua.

Tratamiento de los peces enfermos

Hay que colocar a los peces enfermos en una pecera de cuarentena y observar al resto para detectar síntomas. No vuelvas a introducir a los peces en el acuario o estanque hasta que estén completamente curados.

Medicamentos

Si las causantes de la exoftalmia en peces son bacterias, el veterinario te dará antibióticos para prevenir su propagación. Estos fármacos se venden en forma de gotas para el agua del acuario o como comida para peces tratada médicamente.

Las piñas de aliso y las hojas de almendro indio pueden ayudar como complemento porque son antiinflamatorias y ligeramente antibacterianas. Además, previenen la proliferación de hongos.

Medidas coadyuvantes

Básicamente, debes evitar el estrés. Si una mala calidad del agua es la causa de la exoftalmia, deberás cambiar el agua por agua del grifo tratada o agua osmótica salinizada para reducir los gérmenes.

Con una sobresaturación de gas deberás abstenerte de cambiar el agua hasta que la exoftalmia remita gradualmente.

Costes del tratamiento

El coste exacto del tratamiento de la exoftalmia en peces depende del número de ejemplares, las pruebas y los medicamentos. Los datos orientativos siguientes corresponden a las tarifas alemanas:

Por un solo goldfish, un chequeo general con asesoramiento cuesta allí 24,62 euros según las tarifas del colegio de veterinarios (2022). El precio de la exploración de una población grande de peces es de 83,77 euros y el de la destrucción de los peces, de 12,19 euros.

Pronóstico: ¿cuáles son las probabilidades de curación?

Aún con el tratamiento, la exoftalmia en peces no siempre se puede curar. Normalmente, la hinchazón remite por sí sola si se trata a tiempo.

Si la causa es un contenido excesivo de dióxido de carbono o una sobresaturación de gas después de cambiar el agua, además de los problemas en los ojos también pueden destruirse vasos sanguíneos o partes de tejido. En este caso, el pez podría morir.

Los peces que están tan perjudicados y están sufriendo se deben sacrificar con el mínimo estrés y dolor posibles.

Causas: ¿qué la provoca?

La exoftalmia en peces no es una enfermedad en sí, sino un síntoma. Por eso, hay varias enfermedades que pueden provocarla. Es muy raro que aparezca en peces totalmente sanos.

En efecto, las influencias ambientales pueden favorecer el brote de la enfermedad. Una mala calidad del agua y las intoxicaciones son las causas más frecuentes.

Prevención: ¿cómo puedo proteger a mi peces?

Cambia el agua del acuario con frecuencia y retira los animales y plantas muertos, así como las sobras de comida. Limpia los filtros y controla el nivel de pH y la temperatura del agua.

Además, puedes ayudar al sistema inmunitario de los peces alimentándolos de forma acorde a la especie con comida de calidad.