Inflamación de las glándulas anales en perros

glándulas anales en perros

Las razas pequeñas son más propensas a la inflamación de las glándulas anales.

La gente que tiene un perro pequeño probablemente habrá oído hablar de la inflamación de las glándulas anales. Pero ¿cómo se detecta una inflamación de las glándulas anales en perros? Y ¿cómo puedo ayudar a mi perro?

¿Es muy peligrosa?

Estrictamente hablando, una inflamación de las glándulas anales en perros no es peligrosa, pero sí muy dolorosa. Además, si no se trata existe el riesgo de que se formen fístulas. A consecuencia, puede producirse una septicemia por las bacterias que penetran el torrente sanguíneo.

Síntomas y signos típicos

Los síntomas más frecuentes de las glándulas anales inflamadas en perros son:

  • Lamidos y mordiscos frecuentes en los conductos excretores de las glándulas anales
  • Aumento del mal aliento por la ingesta de la secreción maloliente
  • Mordiscos en la cola
  • Marcha de trineo: arrastramiento típico por el suelo debido al intenso picor
  • Sacos anales inflamados por obstrucción en los conductos excretores
  • Pujo (tenesmo) doloroso al defecar y apatía
  • Secreción purulenta en la superficie cutánea y coloración rojiza
  • Abscesos en los sacos anales (acumulación de pus) y fístulas (unión tipo tubo entre las glándulas y la superficie cutánea)

Como los perros afectados no solo tienen picor, sino también dolor, hay que llevarlos al veterinario en caso de duda.

Diagnóstico: ¿cómo se detecta?

A través de la anamnesis (cuestionario al cuidador), el veterinario obtiene información importante sobre los síntomas. Por ejemplo, la marcha del trineo es signo de una inflamación de las glándulas anales en perros.

Después de la anamnesis, el veterinario realiza un chequeo general para evaluar el estado de salud del animal. Esto es importante porque, por ejemplo, la fiebre es un indicio de que las bacterias han llegado a la sangre. Para prevenir la generación de resistencias con la administración imprudente de antibióticos, es aconsejable un examen bacteriano de la secreción.

A continuación se lleva a cabo una exploración especial de las glándulas anales. Tras el examen visual (adspección), el veterinario palpa la región alterada. Imaginándonos el ano como un reloj, las glándulas y sacos anales se encuentran a las 4 y a las 8. El veterinario evalúa el tamaño, el calor, la consistencia, el enrojecimiento y el dolor.

Por ejemplo, si las glándulas están muy engrosadas y el perro reacciona poniéndose muy a la defensiva, es muy probable que las tenga inflamadas. Si solo una está engrosada y el perro no muestra más síntomas, el veterinario descartará un tumor con una biopsia.

glándulas anales en perros
El perro intenta aliviar el picor lamiéndose.

Tratamiento ¿qué opciones hay?

El punto central del tratamiento de una inflamación de las glándulas anales en perros es la terapia conservadora. El veterinario extrae la secreción de los sacos anales mediante un masaje y los limpia con fluidos antibióticos o antiinflamatorios.

Mantiene los abscesos y fístulas abiertos y limpia y desinfecta las cavidades a diario. Si el perro tiene fiebre y se encuentra mal, conviene realizar una antibiosis sistémica.

Si el perro no mejora o sigue teniendo dolorosas inflamaciones en las glándulas anales, el veterinario las extirpará quirúrgicamente.

¿Existen remedios caseros contra la inflamación de las glándulas anales en perros?

Si la piel que rodea las glándulas anales está irritada y enrojecida, una compresa con manzanilla o caléndula puede aliviarlas. No obstante, recuerda que no estarás tratando la causa de la inflamación, sino solo aliviando los síntomas.

El tratamiento de una inflamación de las glándulas anales en perros siempre debe dirigirlo un veterinario.

Causas: ¿cómo aparece la enfermedad?

Las causas principales de una inflamación de las glándulas anales en perros son una obstrucción de los conductos excretores y una alteración de la producción de secreción en las glándulas.

Las posibles causas de una obstrucción de los conductos excretores son una diarrea persistente (p. ej., infecciosa o por la alimentación) o un pelaje muy denso y no cuidado.

En casos muy aislados, las inflamaciones en otros órganos colindantes o alteraciones tumorales por la expansión o el estrechamiento de los conductos excretores también pueden desempeñar un papel.

No obstante, los carcinomas de los sacos anales son tumores poco frecuentes en perros. En todo caso, se observan en perros mayores. Dos de las causas más frecuentes de una alteración de la producción de secreción en las glándulas anales son las enfermedades hormonales y las reacciones alérgicas.

Si la secreción formada en las glándulas anales no se expulsa o solo parcialmente, se obstruye en los sacos anales. La consecuencia es un aumento de tamaño de las glándulas que va provocando dolor en la zona.

Además, si hay aún muchas bacterias en la secreción, se produce una inflamación de las glándulas anales en perros. A menudo se trata de bacterias de la flora cutánea normal del perro o bacterias fecales. En la mayoría de frotis se detectan Escherichia coli, estreptococos, clostridios y Proteus.

Debido al hecho de que una inflamación provoca una mayor secreción, esta enfermedad suele convertirse en un círculo vicioso. La presión en los sacos anales aumenta sin parar. A partir de cierto umbral, provoca grietas y fístulas en los sacos (uniones con otros órganos o hacia fuera). Esto puede hacer que las bacterias se incrementen aún más e infecten otros órganos.

Inciso: ¿qué son las glándulas anales?

Los sacos anales (Sinus paranalis) son glándulas del tamaño de un guisante en los machos y las hembras. Se encuentran a derecha e izquierda del recto. Con sus sustancias aromáticas, la secreción desempeña un papel primordial en el comportamiento sexual y el marcaje territorial.

Si la presión aumenta en los sacos, por ejemplo, por el pujo, la secreción sale por los conductos excretores. Esta secreción tiene un olor muy desagradable y un aspecto fluido ligeramente amarillento, a veces con partes marrones.

Pronóstico: ¿cuáles son las probabilidades de curación?

En general, el pronóstico de las glándulas anales inflamadas en perros es muy bueno. No obstante, si no se tratan, pueden producirse complicaciones mortales por una septicemia. Si el perro ya ha tenido esta enfermedad, deberás llevarlo al veterinario periódicamente para tenerlo controlado.

Profilaxis: ¿cómo se puede prevenir?

Para evitar una inflamación de las glándulas anales en perros, debes evitar que los conductos excretores se adhieran. Para ello, es aconsejable exprimir los sacos anales cada equis semanas. Esto lo hace un veterinario o puedes hacerlo tú mismo/a con los conocimientos necesarios. No obstante, debes prestar atención a la higiene para que no se produzcan infecciones bacterianas.

🛈 Los datos que se ofrecen en el magazine de zooplus tienen únicamente fines informativos y no pueden sustituir la visita a un veterinario colegiado. Nuestros artículos no deben utilizarse para realizar autodiagnósticos ni para elegir métodos terapéuticos. Si tu animal presenta síntomas de problemas de salud, pide siempre ayuda al veterinario.
Nuestros artículos más útiles
5 min

Tos en perros

La tos en perros, al igual que en los humanos, no es una enfermedad independiente. Es un síntoma de afecciones del aparato respiratorio u otros órganos. La tos puede ser también un reflejo para proteger al cuerpo de diferentes elementos, como cuerpos extraños o sustancias irritantes. A menudo la tos puede confundirse con vómitos o regurgitación, estornudos inversos, asfixia o jadeos intensos. Podemos diferenciar entre tos irritativa sin expulsión (tos no productiva) y tos húmeda con expulsión (tos productiva). Ambos tipos de tos pueden ser crónicos o agudos.
11 min

Castrar a un perro

Hace mucho tiempo que la castración es una intervención rutinaria en las clínicas veterinarias. Pero ¿castrar a un perro siempre es una buena idea? ¿Qué diferencia hay entre la castración y la esterilización? ¿Cuánto cuesta el procedimiento? Te contamos todo lo que necesitas saber y los pros y contras de castrar a un perro.
11 min

Vacunas para perros

Sin lugar a duda, las vacunas para perros protegen a tu peludo de enfermedades infecciosas graves. ¿Qué vacunas para perros son obligatorias? ¿Cuándo se realiza la primera vacuna en los cachorros y cada cuánto hay que actualizar la inmunización para protegerles de por vida?