Anticonceptivos para perros 

Cuando la perra está en celo por primera vez y el macho empieza a rondarla por el vecindario, el cuidador debe empezar a plantearse la contracepción de su animal. Pero ¿qué métodos hay para prevenir el embarazo de las perras y qué anticonceptivos para perros existen?

¿Cómo se previene una camada indeseada?

Por muy monos que sean los cachorros, la mayoría de gente no dedicada a la cría prefiere prevenir los embarazos, y con razón. Especialmente los que tienen perras se suelen estresar mucho durante la época de celo. Evitan al perro del vecino, llevan a la perra con una correa corta, le ponen braguitas y usan espráis antiolor. No obstante, estos no son métodos seguros para prevenir un embarazo. Es habitual que las perras en celo se escapen y encuentren solas el camino a su amado.

Métodos de prevención naturales

Que no cunda el pánico; ya tienes bastante con tu perra volviéndose un poco loca. Infórmate sobre cómo funciona el celo y cuáles son los días más intensos. La fase de fecundidad y disposición para el apareamiento dura entre cinco y nueve días, y aparece una o dos veces al año. Fuera de esta fase, puedes llevarla a lugares con muchos machos, pero durante estos días deberás ir con cuidado. Llévala siempre con correa y a lugares apartados donde haya menos probabilidades de encontrarse con un macho caliente. Dirígela con aplomo físico y mental, y procura que se interese más por jugar que por el perro del vecino. Si también tienes un macho, no los dejes sin supervisión durante este periodo. Sepáralos temporalmente o ponles la correa también en casa, por seguridad. Con estas medidas preventivas evitarás que tu perra se quede embarazada de una manera totalmente natural y económica.

¿Qué métodos anticonceptivos existen para perras?

No obstante, es legítimo querer ir sobre seguro. Existen varias opciones para prevenir o interrumpir un embarazo. Infórmate de antemano sobre los diferentes anticonceptivos para perros que hay y no decidas nada premeditado basándote en bajos costes o implementaciones prácticas. El bienestar de tu perra siempre tiene que ser lo primero. Para que puedas hacerte una primera idea de las opciones que hay, te presentamos los anticonceptivos para perros más comunes y te explicamos sus ventajas e inconvenientes. No obstante, esta información no debe sustituir una charla al respecto con el veterinario.

Método hormonal: inyecciones y pastillas anticonceptivas para perros

Si se previene o interrumpe un embarazo con hormonas, esto tiene la ventaja de que no es necesario operar. Además, el embarazo sigue siendo posible más tarde, una vez interrumpida la terapia hormonal. Para los que algún día quieran cachorros de su perra, la terapia hormonal es más atractiva que una castración definitiva.

1. Inyecciones de hormonas:

Las inyecciones de hormonas para perras son comparables a la píldora de las mujeres. En la fase de reposo tras el celo, se administra una inyección que se debe repetir exactamente cada cinco meses. Estas inyecciones cuestan unos 50 euros por unidad, por lo que este método es relativamente económico. Tras omitir una inyección, la perra puede quedarse embarazada inmediatamente. Sin embargo, la administración regular de hormonas tiene muchas consecuencias en todo el organismo de la perra. Algunas pierden energía, están cansadas y apáticas, y pueden desarrollar obesidad.

2. Antihormona:

Las llamadas antihormonas corresponden a nuestra píldora del día después. Si ya ha habido una fecundación, impiden que el óvulo anide en el útero. Tienen efecto hasta el 45.° día después del apareamiento e interrumpen el embarazo en un plazo de una semana en el 90 % de los casos. Sin embargo, existe un riesgo residual del 5-10 % de que algunos fetos sobrevivan en el útero, a veces gravemente perjudicados. Este método cuesta más de 100 euros, por lo que es bastante caro y solo debe usarse para emergencias.

3. Otros métodos hormonales:

Una alternativa a las inyecciones de hormonas es el tratamiento con estrógenos. También es seguro y económico, pero puede provocar supuración en el útero. Los posibles daños asociados en la médula pueden ser mortales para la perra si no se tratan. La administración de hormonas tisulares especiales (prostaglandinas), que sirven para eliminar los fetos a partir del 35.° día después del apareamiento, también entraña riesgo de enfermedades.

Intervenciones quirúrgicas: esterilización y castración

Si se quieren evitar las crías a toda costa, las intervenciones quirúrgicas son un método anticonceptivo permanente. Sin embargo, una operación con anestesia general no es ninguna minucia que se pueda hacer de paso. Sopesa detenidamente las ventajas e inconvenientes de una intervención tan radical. También deberías hablar con el veterinario para saber si la operación es posible y conveniente en tu perra.

1. Esterilización:

Con una esterilización se cortan las trompas de Falopio, con lo que se bloquea la vía al útero. Aunque esta intervención también se realiza con anestesia general, requiere un corte más pequeño que con una castración completa. De este modo, el ciclo sexual de la perra no se ve perjudicado. Esto significa que las hormonas sexuales siguen produciéndose y la perra muestra el mismo comportamiento sexual. El coste de la esterilización, que, por cierto, es irreversible, es de unos 200 euros.

2. Castración:

La castración de la perra supone la eliminación íntegra de los ovarios mediante una operación. El argumento más a favor de este método anticonceptivo es la protección ante gran cantidad de enfermedades hormonales. Se previenen tumores mamarios, cáncer de mama e inflamaciones purulentas en el útero. También suelen desaparecer los molestos efectos secundarios del celo, como el flujo vaginal, la desobediencia o los embarazos psicológicos. Sin embargo, la castración es una intervención en la vida sexual de la perra que no hay que subestimar. Ya no produce hormonas, no tiene celo y presenta trastornos conductuales frecuentes. Las perras castradas suelen ser menos activas y pueden mostrar una mayor agresividad frente a otras hembras. El sobrepeso también puede ser una consecuencia. Por tanto, conviene sopesar bien este método, que también conlleva gastos elevados por la operación y el posoperatorio. Esta intervención tan radical no es recomendable para perras jóvenes y sanas.

¿Cuáles son los métodos anticonceptivos para perros?

Aunque un embarazo indeseado no es una preocupación para los que tienen machos, es importante que el peludo no vaya reproduciéndose por el barrio libremente. Por eso, conviene usar un método anticonceptivo, especialmente en los perros famosos por sus incursiones en solitario o que sean impulsivos o agresivos.

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Castración hormonal con chip

De manera similar a los anticonceptivos hormonales para perras, también se puede lograr la esterilidad hormonal de los machos. Con esta castración química se implanta un chip bajo la piel del macho que aísla las hormonas e inhibe la producción de testosterona y espermatozoides pasadas entre cuatro y seis semanas durante un periodo de tiempo determinado. El chip se debe cambiar a los seis o doce meses. En cuanto se haya consumido el principio activo, el macho vuelve a poder procrear.

Este anticonceptivo hormonal es conveniente en machos mayores que no puedan recibir anestesia o que sean muy agresivos. Con este simulacro de castración se puede comprobar si el comportamiento del macho cambia al inhibir su instinto sexual.  El chip de seis meses cuesta 80-90 euros y el de 12 meses, 150-160 euros. Un efecto secundario negativo puede ser que pida más comida o le cambie la estructura del pelo.

Castración quirúrgica

A diferencia del tratamiento hormonal temporal, la castración quirúrgica es irreversible. Al igual que con las perras, hay que pensárselo muy bien antes de dar este paso. Sin embargo, la intervención quirúrgica en perros es menor que en las perras. Aunque también se utiliza anestesia general, esta es diferente que en las perras. La operación de las hembras requiere intervenir en la cavidad abdominal, mientras que con los machos basta con un corte en el escroto, a través del cual se extraen los testículos. El tiempo de recuperación tras esta intervención es de solo un día.

Las ventajas de una castración son bastante evidentes, especialmente en machos con problemas de conducta. Tras la intervención, suelen mostrarse más tranquilos y equilibrados, así como más tolerantes con otros perros machos. El comportamiento sexual, el instinto de marcaje y la agresividad disminuyen o desaparecen. Además, la castración los protege contra el cáncer de testículo. Sin embargo, por muy positivas que sean las ventajas, no deben subestimarse los cambios que provoca en el cuerpo. Además del riesgo de la operación y de la anestesia general, puede tener una mayor sensación de hambre y apatía, así como sufrir cambios en el pelo.

¿Qué método anticonceptivo es el mejor para mi perro?

Si has llegado a la conclusión de que los métodos de prevención naturales no bastan para prevenir crías de manera segura o tu perro presenta un comportamiento sexual claramente alterado, los métodos temporales o permanentes pueden aportar muchas ventajas. Sin embargo, nunca se deben realizar intromisiones innecesarias en la vida de un perro. Por eso, pide consejo sobre si un tratamiento hormonal o una operación son necesarios o convenientes para tu perro. Sopesa detenidamente los pros y los contras de los anticonceptivos para perros y ten en cuenta factores como la edad, la salud y el carácter del animal. La decisión sobre si necesita un método anticonceptivo y cuál se debe tomar individualmente para cada perro.