Plantas tóxicas para gatos 

Tu jardín florece con todo su esplendor y tu gato se deleita mordisqueando tus plantas. Por muy bonito que sea este panorama, puede esconder un peligro mortal. Y es que no todas las plantas son inocuas para los gatos. Descúbrelo todo sobre el importante tema de las plantas tóxicas para gatos.

Síntomas: ¿cuáles son los signos de intoxicación típicos?

Si tu gato se ha comido una planta tóxica, los síntomas dependen de la dosis ingerida. Los más típicos son:

• Mayor salivación
• Vómitos
• Diarrea
• Convulsiones o incluso parálisis
• En algunos casos, problemas respiratorios o arritmia

En función de la dosis, los gatos pueden morir por las consecuencias de una intoxicación. Si sospechas que se ha comido una planta tóxica, llévalo al veterinario lo antes posible.

¿Cuáles son las plantas venenosas para gatos?

Plantas de interior tóxicas

Las gramíneas son uno de los menús principales de los gatos porque las necesitan para regurgitar las bolas de pelo. Así pues, más de una vez habrás tenido que sacrificar una planta de interior.

Sin embargo, te puede salir mal la jugada, pues no todas las plantas de interior son inocuas para los gatos. Estas plantas de interior no deben estar dentro de casa ni en el balcón:

Plantas de jardín tóxicas

Si tu gato es de exterior, seguro que estará contento cada primavera, cuando tu jardín florece. No obstante, asegúrate de que no toque ninguna de estas plantas de jardín venenosas:

¿Por qué comen plantas los gatos?

Al acicalarse, los gatos se tragan muchos pelos cuando se lamen con la lengua áspera. En el estómago, estos pelos se mezclan con la saliva y forman bolas de pelo grandes. Los gatos de pelo largo son los que más lo sufren. Si las bolas de pelo son demasiado grandes y no llegan al intestino, el gato las vomita.

En este artículo encontrarás más información sobre las bolas de pelo en gatos.

Para favorecer esto, el gato come plantas. Las fibras de las gramíneas jóvenes inocuas los ayudan e, indirectamente, previenen oclusiones intestinales peligrosas.

Puedes ayudar a tu gato con cereales recién sembrados, Cyperus o hierba gatera, que encontrarás ya preparada en tiendas. Además, estas plantas contribuyen a alejar al minino de las plantas tóxicas para gatos que tengas en casa.

Para que tu minino coma las gramíneas adecuadas, observa detenidamente los bordes. Estos deben ser blandos y no cortantes. Las gramíneas afiladas pueden dañarle la cavidad bucal gravemente o quedarse atascadas en el esófago.

Lee nuestro artículo La hierba para gatos adecuada para elegir la hierba correctamente.

Plantas no tóxicas para gatos

Hay plantas no tóxicas que les gustan mucho a los gatos, especialmente estas tres:

1. Menta gatera

Esta planta tan famosa entre cuidadores de gatos contiene una sustancia embriagadora para los mininos. Su efecto estimulante causa euforia en muchos gatos, por lo que quieren jugar con la planta.

En cambio, otros gatos pasan olímpicamente de ella. El motivo de esto sigue siendo una incógnita. Esta hierba también se encuentra a menudo en juguetes y otros objetos (p. ej., en rascadores).

2. Tomillo de gato

El olor del tomillo de gato (Teucrium marum) es atrayente para algunos gatos. La planta procede del oeste de la región mediterránea y se puede cultivar tanto en maceta como en cubo.

Aunque esta preciosa planta lila y florida huele a éter para las personas, la mayoría de gatos se pirran por ella, también seca.

3. Valeriana

La valeriana (Valeriana officinalis) también despierta el interés de muchos gatos. Esta planta, que huele a alcanfor cuando está seca, también se conoce como raíz de gato, ya que los mininos se revuelcan en ella y maúllan mucho de alegría. Tampoco aquí se conocen los motivos de este comportamiento.

En la tienda de zooplus encontrarás fantásticos juguetes rellenos de valeriana o menta gatera.