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Para los perros, unos dientes sanos son muy importantes para comer y jugar.
A los perros les encanta explorar el mundo con la boca. Por eso es tan importante cuidarles los dientes correctamente. Aquí te explicamos los secretos de una buena higiene dental en perros.
¿Por qué es tan importante la higiene dental en perros?
Existen numerosos estudios independientes que han investigado la aparición de enfermedades gingivales en perros. Estos estudios demuestran que las encías de cuatro de cada cinco perros mayores de tres años han sufrido alteraciones patológicas. Por lo tanto, la mayoría de perros mayores tienen problemas de encías graves.
Los perros no solo utilizan la dentadura para masticar la comida, sino también para levantar y mover objetos. Por consiguiente, sus dientes son tan importantes para ellos como las manos para nosotros. Además, como hacen tantas cosas con ellos, una limpieza dental canina regular es indispensable.
¿Cómo se producen los problemas de encías?
Cuando el perro come, ingiere una gran cantidad de bacterias a través de la comida. Con el tiempo, estas se acumulan en la zona entre dientes, cerca de la encía. Aquí se quedan pegados trozos de comida después de comer, de los que se alimentan los gérmenes.
Poco a poco, los gérmenes, junto con los restos de comida, forman una capa blanca pegajosa que se denomina placa. Si no se elimina, se forma el sarro amarillo parduzco. Estos depósitos duros atacan la encía y el tejido circundante tan intensamente que estos se inflaman. Si las bacterias que contienen atacan el esmalte, provocan caries.
¿Qué pasa si no se practica una buena higiene dental en perros?
No te tomes la higiene dental de tu perro a la ligera. Si no le lavas los dientes, estos pueden enfermar y provocar graves inflamaciones en la boca. Los perros afectados suelen presentar estos síntomas:
Dolor
Para los perros, la gingivitis causada por la placa o el sarro es muy dolorosa. Las inflamaciones pueden propagarse extensamente por la encía, desprendiéndose esta y dañando el periodonto.
Problemas de masticación
Si tu perro tiene dolor de dientes, esto puede influir en su ingesta de alimentos. Así, es posible que no quiera comer o que mastique más cuidadosamente. Si los gérmenes han penetrado el tejido profundo y han provocado un absceso, esto también puede dificultar la masticación.
Mal aliento
Cuando las bacterias presentes en la placa o el sarro descomponen los restos de comida, forman compuestos organosulfurados. Se sabe que estos huelen muy mal y provocan mal aliento en los perros.
Infecciones bacterianas
Si las bacterias consiguen llegar al torrente sanguíneo, también pueden provocar inflamaciones en otros órganos. No es infrecuente que se relacione una endocarditis o una nefritis con problemas dentales. En el peor de los casos, esto puede ocasionar una septicemia, que podría acabar con la vida del perro.
La higiene dental correcta
Cuanto más a menudo le laves los dientes a tu perro, menos sarro se formará. Esto significa que una higiene dental diaria es el mejor requisito para unos dientes sanos.
Para la higiene dental en perros, puedes combinar lo siguiente:
Lavado de dientes
Lávale los dientes a tu perro regularmente con un cepillo especial. Así, podrás eliminar los restos de comida gruesos de entre los dientes. La pasta dentífrica especial para perros ayuda a combatir el mal aliento y hace que el procedimiento sea más sabroso para él. Recompensando al perro después de cada lavado podrás hacer que se acostumbre.
Pese a todas las medidas de higiene dental en perros, puede que se forme sarro igualmente. Si tu perro es propenso, conviene que lo lleves al veterinario para que le haga chequeos periódicos.
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