Alimentación para gatitos

Los gatitos, al igual que los cachorros, tienen una demanda de nutrientes especial para un crecimiento saludable. Esta demanda depende de la raza, la edad y el carácter. Los gamberros necesitan más energía que los dormilones. Por muy monos que sean los gatitos rollizos, esto no les conviene en absoluto. Las costillas deben notarse perfectamente a través del pelo y la cintura debe ser visible. Para que tu gatito reciba la energía y los nutrientes que necesita para crecer, la alimentación para gatitos correcta es de suma importancia.

Alimentación para gatitos: ¿cuándo hay que empezar a darles de comer?

En cuanto la producción de leche materna empiece a menguar (a las tres o cuatro semanas), debes empezar a acostumbrar al gatito a la comida sólida.

Los gatitos empiezan a alimentarse exclusivamente de comida para gatitos a partir de los tres meses. Para acostumbrarlos a la comida sólida, puedes empezar con raciones pequeñas.

Si no aceptan la comida, se puede mezclar con leche de sustitución al principio para aumentar la aceptación. No obstante, la proporción de leche debe reducirse rápidamente para que los gatitos no ingieran demasiada energía.

Alimentación para gatitos: de diez a doce semanas

Las primeras semanas constituyen la fase de impronta alimentaria del gatito. Por eso, debe conocer varias formas de alimentación, como pienso, comida húmeda y alimentos cocinados en casa. De este modo, no se acostumbrará solo a un alimento.

Si es necesario cambiarle la comida en algún momento por razones de salud, este cambio resultará más fácil. Ten en cuenta que los gatos en edad de crecimiento tienen una elevada demanda de vitaminas y minerales. La alimentación para gatitos de buena calidad cubre esta demanda a la perfección.

Hasta los cuatro meses

En este periodo, la forma de alimentar a un gatito se debe adaptar a la anatomía del animal. Aunque su aparato digestivo aún no se ha desarrollado del todo, tiene mucho apetito. Por eso, repártele muchas comidas pequeñas a lo largo del día.

Las horas de las comidas se deben mantener ya desde ahora. El comportamiento alimentario del gato prevé hasta veinte comidas pequeñas distribuidas por todo el día, incluso por la noche. Por lo tanto, conviene dejarle un poco de comida antes de acostarse para que pueda comer algo por la noche.

De los cuatro a los seis meses

A partir de los cuatro meses, puedes adaptar la alimentación para gatitos al comportamiento alimentario típico de los gatos. Los gatos prefieren comer muchas comidas pequeñas repartidas a lo largo del día, entre diez y veinte.

Como son crepusculares y nocturnos, también comen por la noche. El secreto está en ofrecerles comida tan a menudo como sea posible sin sobrealimentarlos. Como mínimo deben tener a su disposición tres comidas principales, una de ellas al final de la tarde.

Si le das pienso, asegúrate de no sobrepasar la demanda energética diaria del gatito. En efecto, el pienso es mucho más calórico que la comida húmeda.

A partir de los siete meses

A partir de esta edad, si mezclas tipos de comida, la húmeda ya se puede dividir en dos comidas principales. Dale una ración por la mañana y otra por la noche. Para satisfacer la demanda de muchas comidas pequeñas a lo largo del día, puedes darle pienso para entre horas. Al hacerlo, no pierdas de vista la ingesta calórica total diaria.

¿Son importantes los líquidos en la alimentación para gatitos?

Al alimentar a un gatito con comida húmeda, el animal ya ingiere líquidos. No obstante, debe tener agua limpia e ilimitada siempre a su disposición.

Aunque los gatitos suelen tolerar la leche al principio, después muchos tienen diarrea por el exceso de lactosa. Como complemento, puedes darle leche para gatos baja en lactosa.

Descubre nuestra tienda para gatitos y lee nuestro artículo La adaptación de los gatitos: equipamiento básico y consejos.