El carácter del knabstrupper no es tan excéntrico como su aspecto. Algunos tienen un carácter poco convencional, pero no dejan de ser equilibrados, tranquilos, dispuestos a aprender y, en general, controlables.
Así pues, cubren un espectro bastante amplio. Más allá del deporte de ocio, estos caballos muestran una habilidad magnífica en la doma clásica. Además, la inteligencia, la diligencia y su exterior expresivo los hacen perfectos para la alta escuela.
¿Es apto para principiantes?
Gracias a su simpatía y serenidad, el knabstrupper es un caballo de paseo y silla ideal para jinetes jóvenes y principiantes adultos.
No obstante, estos deben contar con algo de experiencia y soberanía en la monta. De lo contrario, algunos de estos caballos aprovechan la oportunidad para imponer su voluntad.
Ser sensible
Aunque el knabstrupper es muy enérgico, también es famoso por su sensibilidad. Busca el contacto con las personas y le gusta que se le dirijan personalmente.
Por eso, es importante que el jinete se muestre empático y lo controle suavemente a través de una conexión armoniosa. No se debe responder a la testarudez con dureza, ya que, de lo contrario el caballo se hermetiza.
Un buen vínculo entre el jinete y el caballo también constituye la base de la formación del knabstrupper. Con paciencia y confianza, se puede convertir en un compañero concentrado y eficaz en casi cualquier estilo de equitación. El trabajo invertido te lo pagará con una gran fidelidad.