Un fiasco
Lo compré con la esperanza de relajar a los mininos, algo extresados con la llegada de otro adulto. Pero para nada! De echo, lo coloqué junto al rascador, y ahí, con el difusor al lado, andaban gruñéndose seriamente enfadados, los dos de casa, por más que el invitado se tumbase panza arriba para calamarlos. No lo recomiendo en absoluto.