El olor la vuelve loca el tamaño ya es otro tema
A Xana el pescado y mariscos en general le gustan mucho. Estos snacks le han encantad, tenía acceso al sitio donde guardaba la bolsita y siempre venía y la robaba para mordisquearla, tuve que pasarlos a un frasco de vidrio porque ya la había rasgado. En cuanto los huele se vuelve loca, lo coge y se lo lleva de un lugar a otro para irlo mordisqueando antes de poderlo comer. Algunos son pequeños, pero al estar un poco duros (por estar deshidratados) y ser grandes, le cuesta un poco hincarles el diente. La solución, dárselos por mitades.