241 valoraciones deRascador de cartón Scratch & Play para gatos

A mis gatos les encantan los rascadores de cartón, los rascan mucho y se tumban a descansar. Este rascador cumplió muy bien esta función. Ahora bien, no le dedicaron más de 2 segundos a los agujeros y la pelota. Es cuestión de gatos, pero yo voy directamente a comprar los rascadores más simples, más baratos porque no me sale a cuenta.

Lo usa muy de higos a brevas como rascador aunque he de reconocer que las pelotitas le encantaron! Ya ha sacado las dos bolitas y las ha perdido por algún rincón de la casa! También lo usa para dormir a modo de cama! Mi gatito tiene 3 meses, no sé como le irá de más adulto pero he de reconocer que no me arrepiento de haberlo comprado!

A mi gata le encantó pero se hundió en el centro en cuanto se subió (y mi gata es pequeña).

Se rompió enseguida y no por el desgaste del cartón si no por uno de los agujeros se empezó a rajar con el peso de los gatos se ha hundido porque es hueco; no ha durado ni 1 semana

Iniciamos la experiencia bien, nuestra gatita de poco más de un año estaba interesada en buscar las pelotas que sonaban dentro del juguete pero .... ups .... en cuantro encontró la forma de cazar las pelotas y sacarlas fuera del juguete, pasamos a otro nivel. Ahora son pelotas normales perdidas por casa.

Me gustaba mucho porque tenía también los juegos por abajo, pero como rascador es muy poco resistente, si los gatos van por encima del rascador algunas veces, el cartón se pliega porqué en el centro no tiene apoyo, como tiene en los laterales. Cuesta poco, pero vale poco, bien las pelotas con sonido que encantan a los gatos que juegan por la terraza, porque en dos segundos ya las dos pelotas estaban afuera de su sitio...creo que no lo compraré otra vez, prefiero algo de más duradero.

le hizo caso enseguida pero solo lo usa como rascador,lo de los cascabeles de dentro pasa de ellos.Al rascar el cartón se despedaza por todos lados y es muy sucio.

A mis dos gatos (de 7 meses) les costó empezar a jugar con esto. Después ha ido mejorando y de vez en cuando lo rascan, mueven la pelota o se tumban, pero no es algo por lo que muestren mucho entusiasmo.